miércoles, 9 de abril de 2014

Desarrollo conceptual sobre la Autonomía según Piaget


Jean Piaget hace una diferenciación clara sobre la forma en que se ve expresada y materializada la autonomía dentro del desarrollo evolutivo de los niños. Esta autonomía se va formando, transformando y asimilando constantemente desde su nacimiento hasta que estos puedan alcanzar un razonamiento valorativo, crítico e independiente.

Piaget hace una distinción entre los dos tipos de moral que denomina como, la moral de la heteronomía y la moral de la autonomía.

La Heteronomía:

Es la primera instancia que se ve presentada por los niños (de forma natural), en ella son dependientes a los juicios que son hechos por parte de sus padres, familiares, maestros entre otros y por ello permiten y se regulan en torno a unas imposiciones y normatividades (sociales, institucionales, comportamentales, etc.) que no entienden, pero que con la coacción ejercida hacia ellos aceptan y ejecutan las normas establecidas.

Dentro de la heteronomía no se presenta un razonamiento previo y constante dentro de la ejecución de las acciones, por el contrario lo que se realiza es una asimilación de lo que se considera verdadero, correcto y aceptado por todos en conjunto, por lo tanto lo que hace el niño es reconocerlo para poder implementarlo, esto principalmente reforzado por quienes son las figuras de autoridad y legitimidad dentro del desarrollo y cotidianidad del niño.

La Autonomía:

Este es un desarrollo continuo que se va adquiriendo posteriormente dentro de la vida de los niños y que va evolucionando sobre la heteronomía reinante y originaria de la infancia, se hace un proceso en el cual se reconocen las normas que están circulando alrededor y se cuestiona y piensa sobre ellas, aunque pueda que aún las siga será bajo la base de una reflexión previa en la que pueda pensarse porque estas normas están construidas y bajo que bases se sustentan, o quizás por el contrario desechar algunos viejos postulados por no ser válido dentro de su análisis personal.


Las personas están en una constante búsqueda para adquirir su autonomía, entendida esta como el gobierno de sí mismo, para dejar de lado el gobierno de si por parte de otros. Esa autonomía se enmarca entorno a razonar de forma crítica lo establecido y reflexionar las acciones propias y las de los demás para poder hacer cambios para el mejoramiento, según la subjetividad expresada y creada en la persona en ese proceso.